apuesto que si sos un tipo convencional
de esos que se levantan a las 5 de la madrugada
prepara el mate y arranca de un mordisco una migaja
mira la calle desolada y detiene sus ojos en la cruel mañana
cuando te enfrentas al espejo te preguntás que fue lo que pasó
resignado rasurás tu barba en la práctica cotidiana
te bañas un día sí y un día no porque el jabón a veces
no alcanza
te vestís con tus pobres pilchas de asalariado
marginal
mirás a tus hijos dormidos y temblás al decirles adiós
cerrás la puerta y dejás detrás de vos una casa a
medio terminar
subís a tu bicicleta y atravesás la ciudad de una
punta a la otra
sabiendo que para eso no necesitás ser un ángel
te sentás frente a la máquina de escribir porque no
te queda otra
más que repetir el acto cotidiano al que te
acostumbraste
a fuerza de no haber tenido otra oportunidad
apuesto que volvés y no te animás a besar a tu mujer
porque la vergüenza te robó el último gesto de
dignidad
y tus hijos no te abrazan porque ya lo entendieron
apuesto que cenás sumido en el silencio del
abandono
y apagás la luz a última hora sabiendo que te
esperan
diez años más aunque no sabés si tendrás la valentía
suficiente
porque la actitud no la podés comprar en un shopping
de clase media
y no te animás a cerrar los ojos para no tener que
volver
a repetir cada mañana la misma historia
apuesto que si desesperado un día decidís pegarte un tiro
y así terminar con tu ruinosa vida de imposibilidades
apuesto que nadie saldrá a la calle a gritar tu
nombre
mucho menos a decir que ellos son vos…
Ana Danich (de: Cuerpo de Piedra)