SOLO LAS PALABRAS QUE MERECEN EXISTIR, SON LAS PALABRAS MEJORES QUE EL SILENCIO.

domingo, 23 de marzo de 2014

OTOÑEANDO


Mientras yo aquí lloro de alegría y río de dolor, los arces deben estar mostrando sus primeros cogollos primaverales frente a mi ventana, diles por favor que sus hojas de otoño aún reposan entre mis libros disecadas al calor de mi afecto.
Clemencia Gómez

Aquí, en mi tierra los árboles mudan el color de sus follajes, el amarillo y el rojo se disputan su tonalidad final, serán ocres muy pronto y luego caerán. Con el otoño llega la desnudez…yo también como vos, lloro de alegría y río de dolor. Nunca guardé entre mis libros, hojas de otoños pasados…

Ana Danich.


No hay comentarios:

Publicar un comentario